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Hasta el año 2017 era un sistema de extracción de agua en dos puntos, con Parcent que suministraba agua en el sector de La Solana y con otro pozo en Llíber, que suministraba agua en el casco urbano y diseminados sur. Este segundo pozo de agua tiene niveles de salinidad y por tanto restricciones para el consumo humano. A partir del año 2017 se construyen nuevas instalaciones, se reducen las fugas de agua y se posibilita que todo el pueblo disponga del agua potable de Parcent, convirtiéndose en un único punto de suministro que abastece a los tres depósitos ubicados en La Devesa y La Solana. El pozo de Parcen es propiedad de la Comunidad de Regantes de la Vall del Pop, que venden el agua a Xaló, Parcent, Llíber y Alcalalí. Estos pueblos trasladan el agua de los depósitos de los regantes a las plantas potabilizadores ubicadas en Parcent y el agua potabilizadora se almacena en un dipósito propiedad de los municipios en Parcent. Desde este punto se distribuye a los depósitos de los pueblos.

¿Cuál ha sido el problema?
Es habitual que cada año la Comunidad de Regantes lleve a cabo el traslado de la bomba a más profundidad por la bajada del nivel de agua. Este hecho se ha acentuado desde las obras de aprofundización del pozo de Benigembla realizadas en 2018 para abastecer el municipio de Benissa, ya que se trata del mismo acuífero. Esta operación de cambio de nivel de la bomba fue realizada días antes para los regantes de Parcent y se activó un protocolo de emergencia para evitar los cortes de agua. En Xaló se logró con normalidad el suministro a excepción de un corte de agua de 8 horas en La Solana.

Tras situar la bombas a más profundidad el sistema eléctrico, saltaba varias veces al día. Este hecho provocaba problemas de suministro que han conllevado continuas reprogramaciones de las rutinas de suministro. Se desconoce la causa. Finalmente el sábado 3 de agosto la conexión eléctrica de la bomba sufre cortes prácticamente cada horas, haciendo muy complicado mantener el servicio y se decide volver a extraer la bomba el lunes con el agravante de que la bomba de sustitución está también en el taller para ser reparada. Se consigue funcionar de esta forma intermitente durante el domingo para evitar cortar el suministro hasta el lunes. Ese lunes empiezan los trabajos de sustitución de la bomba. El alto consumo provoca que en unas horas los depositos de Xaló se vacíen y se decide de emergencia volver a activar el pozo de Llíber (que había suministrado tradicionalmente agua al pueblo hasta 2017), para ofrecer una alternativa al servicio aunque este tiene restricciones para el consumo humano. El proceso se comunica a Proaguas, empresa pública de la Diputación de Alicante y sus ingenieros hídricos asesoran y encargan analíticas de seguridad.

Los regantes de Parcent comprueban que el motivo de la avería era la rotura parcial del cableado, que provocaba los cortes eléctricos. El martes a primera hora de la tarde se completaron los trabajos y empezaron a llenarse sus depósitos. A las 19 horas se activa de nuevo la planta potabilizadora y empieza a servirse agua a la zona de La Solana que llega con normalidad a las casas entre las 21 y las 23 horas.

¿Por qué La Solana sufre cortes y el resto del pueblo no?

En concreto, el 70% del municipio ha podido tener agua con restricciones para el consumo humano sin cortes, el 10% (Valle del Paraíso y L’Almàssera) no han sufrido cortes y han tenido agua potable y alrededor del 20% han tenido cortes de agua que han oscilado entre las 18 horas y las 24 horas de duración.
La zona de La Solana se alimenta del depósito ubicado en Parcent, que es el primero que suele vaciarse. Y en este momento no es posible conectar con el agua procedente del pozo de Llíber como el resto del municipio. La zona del Valle del Paraíso y L’Almàssera tienen depósitos propios que han aguantado unas horas más el servicio.

¿Puede volver a suceder?

Un episodio en el que coincidan diferentes factores no es habitual. No obstante, nuestra dependencia actual de un solo punto de agua en Parcen nos hace más sensible a sufrir cortes por averías.

¿Qué puede mejorar el ayuntamiento?

Todas las crisis hacen visibles también posibles mejoras. A nivel de infraestructuras y desde que todo el pueblo disfruta de agua potalble (finales de 2016) no habíamos tenido ningún problema cuya solución requiriese de tantas horas. Esto nos ha hecho ver las siguientes carencias y propuestas de mejora:

– Es un recurso positivo haber mantenido operativo estos años (contrato de luz y analíticas de control) el pozo de La Definitiva en Llíber, porque si bien es agua con restricciones para el consumo, nos ha permitido mantener el servicio de agua en gran parte del municipio. La previsión ha evitado un gran corte de agua en todo Xaló.

– Tenemos que ser capaces de conectar en el futuro La Solana con el depósito de agua del casco urbano ubicado en La Devesa. Esto puede ofrecer en la zona de La Solana más tiempo de servicio de agua si se produce una avería y en caso de que se prolongue podría mantener el servicio con el pozo de Llíber.

– Hay que encargar un estudio para renovar el depósito viejo de un millón de litros que está inactivo en la Devesa. Hay que comunicarlo con el depósito nuevo. Esto aumentaría hasta los 3 millones de litros el activo de agua de reserva en caso de emergencia.

– A largo plazo, hay que avanzar en los trabajos para tener por primera vez un nuevo pozo propio con capacidad para suministrar agua a todo el municipio.

– Hay que seguir mejorando las vías de comunicación con los usuarios para informar de manera más rápida y eficiente.

– Hay que continuar exigiendo infraestructuras para los municipios de interior. Se han realizado grandes infraestructuras para dotar a los pueblos turísticos de la costa agua del interior y se veta el acceso de los pueblos pequeños rurales a estos recursos.

– Hay que tener en cuenta los efectos del cambio climático. Cada vez es más difícil manter el actual ritmo de consumo de recursos naturales. La situación de los acuíferos es de mínimos históricos.